¡Eres un egoísta! No quiero volver a verte jamás; está bien, ¿te has ido? Pues no hace falta que vuelvas. Aquí ya no está tu lugar y, ¿sabes que te digo? Que me alegro porqué no quiero a mi lado a un tipo que se marcha sin dar la cara. Adiós; ¡no voy a volver a pensarte nunca más!
Patricia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario